Los feroces ataques de Unión por la Patria a Bullrich y Milei indican que se saben perdedores, por eso, en los meses que quedan hasta entregar el gobierno, harán lo necesario para garantizar la impunidad de toda la «banda» y de ser posible seguir, desde algún lugar, sea un gobierno provincial, municipal o el de una sociedad de fomento, robándose los recursos en beneficio propio.
DANIEL SALMORAL.- Cuando faltan tres semanas para que se vote en las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) nacionales, los pronósticos que se conocen hasta ahora por parte de diversas consultoras, con variada cercanía política con uno u otro frente, coinciden en adelantar el escenario de segunda vuelta, salvo que el domingo 13 de Agosto, las urnas, al cierre del comicio, revelen lo que algunos denominan «voto oculto», que no se manifestó de manera previa y recién apareció en el momento indicado, para inclinar la balanza de manera definitoria hacia uno u otro candidato y así determinar que será ese quien habrá ganado en primera vuelta y no será necesario ir a un balotaje.
Recordemos que de acuerdo a lo que establece la Cámara Electoral Nacional, para que un candidato gane en primera vuelta la elección presidencial, es necesario que obtenga el 45% más uno de los sufragios o bien el 40% y sacarle el 10% de diferencia al segundo. Si esto no ocurre, será menester ir a un segunda vuelta o balotaje que en este caso se tendría que realizar el 19 de Noviembre.
Hasta ahora, ningún pronóstico revela esa posibilidad, pero de todas maneras se debe recordar que el «voto oculto» puede estar presente.
Ante la cercanía de un escenario de doble votación, es necesario analizar cómo jugarían las fuerzas políticas que quedaría fuera de esa disputa, y vislumbrar hacia adónde podrían inclinar a sus votantes.
Según lo conocido hasta ahora, serían solamente 3 de las 27 fórmulas a presidente y vice las que estarían en condiciones de disputar con chances el sillón de Rivadavia y eso es lo que ha llevado a que varios conocidos politólogos, algunos de ellos con diplomas de la UCA (Universidad Católica Argentina) hayan hecho saber a través de publicaciones en medios radiales, televisivos o gráficos, que sería un grave error si los candidatos de los frentes UxP y JxC, «ningunean» a Javier Milei y ya lo descartan de la contienda, porque afirman que el candidato libertario no sólo ha recuperado sus niveles positivos en las encuestas sino que en algunos casos ha crecido, y eso lo ubica en lugares de expectativa cierta sobre todo si se llega a la segunda vuelta electoral.
«Sería una costosa equivocación pensar que Milei está liquidado electoralmente hablando, porque hay una buena parte de la sociedad argentina, en los sectores jóvenes y también en los adultos cercanos a los sesenta años, donde no solamente recuperó apoyó sino que lo incrementó ubicándose hoy como una posibilidad cierta de voto oculto en varias provincias argentinas, muchas de ellas con importantes padrones electorales», ha dicho uno de estos politólogos a través de una publicación en un conocido diario porteño.
Lo cierto es que hasta ahora, según los adelantos de las consultoras, la disputa estaría entre el principal candidato de Unión por la Patria, Sergio Massa y quien se indica ganaría la puja en territorio de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich quien se impondría al otro candidato, Horacio Rodríguez Larreta, ya que según la mayoría de los analistas políticos, entre los que se incluye el autor de esta columna, tiene un discurso más frontal contra el kirchnerismo, lugar en el que ya sin dudas está habitando Massa, alejado ahora de las duras críticas que había vertido hacia todo lo K, sobre todo La Cámpora, en días pasados no muy lejanos.
Bullrich, por decisión propia o escuchando asesores, ha endurecido su crítica hacia la gestión albertista, pero sobre todo a la figura del candidato Massa, a quien comenzó a cuestionar con mayor asiduidad y dureza, cosa que seguramente se irá incrementando a medida que se acerque el 13 de Agosto, domingo en el que habrá que partir hacia los cuartos oscuros.
La ex ministra de seguridad macrista, con pasado en «la JP que reivindicaba a Montoneros pero no a la generación diezmada», según sus propias declaraciones, también ha ratificado su pertenencia a los «halcones» cuando en el corazón del kirchnerismo en la provincia de Buenos Aires, aseguró: “minga que no nos van a dejar gobernar; nosotros no necesitamos pedirle permiso ni a ellos ni a nadie”.
Esa postura que puertas adentro de Juntos por el Cambio es cuestionada no solamente por su adversario directo sino también por otros como los partidarios de Elisa Carrió de la CC, va mostrando que para el sector al que denominan «palomas», el lenguaje verbal y gestual de Bullrich, más su dureza en momentos de referirse a Massa, como ministro de Economía sobre todo, la ubica en un lugar muy alejado de «los buenos modales» que alguna dirigencia de JxC le viene exigiendo desde hace rato.
Pero si se repasa su gestión en el gobierno de Mauricio Macri, será fácil darse cuenta que su discurso en palabras y en actitudes se irá endureciendo en las semanas por venir.
«Hay mucha gente que recuerda como Bullrich (Patricia) sin ningún problema y con muchos ovarios, lo enfrentó solita a Hugo Moyano y la patota de Camioneros no solo en los estudios de televisión sino también en la calle y eso, para quienes esperan desterrar de una buena vez al kirchnerismo, es un claro indicativo que pueden confiar en ella para que lo haga. Patricia es dura en verdad y está decidida a terminar con los K en todas sus formas: llámense Máximo Kirchner; La Cámpora, Cristina, Kicillof o Scioli. Valor no le va a faltar para hacerlo y eso es lo que los argentinos/as que ya están hartos de verdad con los K están viendo en ella y por eso seguramente le ganará a Larreta (Horacio Rodríguez), que no es tan enfático como ella al hablar de ponerle fin al kirchnerismo», le dijo una reconocida dirigente y militante «bullrichista» a este Portal.
De todas formas, faltan tres semanas para que los ciudadanos/as de a pie decidan: primero, si irán a votar, y segundo, recién por quien lo harán.
Desde el oficialismo, los mensajes de campaña de Massa, Juan Grabois y otros precandidatos, buscan hacerlos aparecer ajenos y lejanos a la actual gestión, lo que muestra hasta adonde llega el grado de locura y desprecio por los electores/as que estos políticos sienten y expresan sin remordimiento alguno.
Ya ningún argentino/a, salvo ellos, pueden querer mostrarse sin responsabilidad por otro fracaso de gestión K y van…
Los versos sobre la obra del gasoducto de Vaca Muerta y la reestatización de Aerolíneas Argentinas, queriendo hacerse ver como «los nuevos luchadores por la independencia argentina», otra vez los muestra como los oportunistas, inútiles y corruptos que son y que tras el disfraz de «nacional & popular», vienen timando y hundiendo al país desde hace más de 20 años.
Los feroces ataques de Unión por la Patria a Bullrich y Milei, indican que se saben perdedores por eso, en los meses que quedan hasta entregar el gobierno, harán lo necesario para garantizar la impunidad de toda la «banda» y de ser posible seguir, desde algún lugar, sea un gobierno provincial, municipal o el de una sociedad de fomento, robándose los recursos en beneficio propio.
Viendo hechos de los últimos días, habría que preguntarse que sentirá Sergio Massa cuando en una fotografía que ganó las páginas de los principales diarios del país, aparece cómodamente sentado compartiendo con quienes, en otro tiempo y otro contexto político, había jurado combatir y sacar de la política. Seguramente que nada. A tipos como el Ministro de Economía, no le interesa el pasado, solo lo que viene y allí es donde buscarán seguir conservando su poder y sus privilegios gracias a quienes todavía creen que algo de dignidad le queda.
En este contexto, habría que parafrasear a Néstor Kirchner y preguntarle: «qué pasha Sergio, estás nervioshoo?»…
Seguramente diría que si porque inteligente como es, ya debe estar imaginando una derrota a manos de alguno de los candidatos de Juntos por el Cambio. Si fuera con Larreta dolería, pero si fuera con Bullrich dolería más.
En una encuesta en la que se pidió definirlo con una sola palabra, la mayoría lo hizo con la de «panqueque», dejando atrás la de años anteriores que era «humoman» (el hombre humo).
En otro lugar, un «panqueque» o un «humoman» nunca aspirarían llegar a presidente, pero como estamos en Argentina, personajes como éste aún pueden soñar con eso.
El 13 de Agosto que viene, la mayoría de los más de 35 millones de electores habilitados, tendrán la posibilidad de comenzar a cerrarle los caminos a personajes como este que lo único que hicieron desde que llegaron a la función pública, fue mejorar sus vidas. las de sus familiares y de sus amigos, a cambio de dinamitar la de buena parte de la sociedad argentina.
