DANIEL SALMORAL.- Comienza el otoño y con él se intensifica el movimiento político en la provincia habida cuenta que el cronograma electoral avanza inexorablemente.
Los partidos, cada uno a su manera, están abocados a definir cuál será el espacio frentista en el que jugarán y a la vez comienzan a tirar nombres de eventuales candidatos/as para los escaños legislativos municipales, provinciales y nacionales que estarán en juego, además de los convencionales que a última hora se agregaron y que obliga a los partidos a bucear entre sus filas, buscando hombres y mujeres con un perfil acorde a la tarea que reformar la Constitución Provincial requiere.
Por ahora, si bien la elección provincial es lo mediato, en los tinglados políticos también ya se comienza a hablar de la elección nacional que en la provincia lleva a renovar tres escaños de diputados.
Si bien es cierto las bancas en disputa para esta elección son exiguas, la mayoría de los dirigentes provinciales esperan que cuanto antes se actualice el número de representantes en el Congreso que le correspondería a Salta, y que llevaría de 7 a 11 las poltronas que deberían ser ocupadas en la Cámara Baja nacional por legisladores de Salta.
Si bien esta decisión la deberá tomar por la Cámara Electoral Nacional más temprano que tarde, todavía no está vigente y por ahora deberán ser únicamente tres las que se reemplacen este año.
Las bancas que se reemplazan
Andrés Zottos; Alcira Figueroa y Martín Grande son quienes terminan sus mandatos y ya se conoce que los tres tienen la intención de seguir allí por lo que en sus respectivos ámbitos buscarán su reelección aún sabiendo que no será tarea sencilla.
En el caso de Zottos, dicen muchos, ya sería conveniente que descanse un rato y al menos durante un período busque ganarse la vida en otra actividad que no sea la política, de la que vive hace ya cerca de 20 años.
En el caso de la señora Figueroa, que llegó a la banca en reemplazo del famoso «chupachichi» Juan Ameri, no se cuestiona su intención de renovar su banca, pero lo cierto es que no la tendrá fácil porque en el Frente de Todos ya se sabe que hay hombres y mujeres anotados/as para sucederla y que trabajan afanosamente buscando apoyos nacionales para tener alguna chance cierta de estar finalmente en la boleta que el kirchnerismo ofrezca al electorado provincial en agosto, si hay PASO nacionales, o sino directamente en octubre.
En el caso de Grande, en el espacio de JxC, parecía que no tendría rivales que le disputaran la posibilidad de la reelección, pero en las últimas horas se conoció a través del programa político, «7 PM», que el abogado Juan Esteban Romero ya está trabajando para ser candidato a ocupar esa banca que quedará vacante a fin de año y por ese sector político.
Sobre la candidatura de Juan Esteban, nieto del exgobernador Roberto, hijo del actual senador nacional Juan Carlos y hermano de la intendenta capitalina, Bettina Romero, se hizo saber que en los próximos días se formalizará su intención de buscar el escaño nacional en juego, a la vez que se ratificará su intención de ir a las PASO, si se realizan, o bien directamente a las generales de octubre.
«El Dr. Juan Esteban (Romero) está dispuesto a someterse a las elecciones que sean necesarias. Jamás pensó que desde arriba o de donde sea se imponga su candidatura. Es un joven preparado que conoce la política desde que nació, además de saber que es lo que los salteños necesitan que un legislador nacional haga desde el Congreso, por eso si hay que ir a las PASO con quien sea lo haremos», fue lo que dijo en el programa político el reconocido dirigente peronista, Jorge Ramón «Cabezón» Medina, que fue quien hizo el anuncio de su intención de lanzarse al ruedo político.
Con Romero (Jr) ya en la arena, el espacio de Juntos por el Cambio en la provincia seguramente se modificará para la elección nacional, teniendo en cuenta además que en el orden nacional días atrás apareció a la luz el «Peronismo Republicano», la «pata peronista» en ese frente, por lo que es lógico imaginar que esta «nueva cepa» peronista pronto tendrá su correlato en la provincia y lo hará, obviamente, de la mano del senador nacional Romero, uno de sus principales referentes nacionales junto a Ramón Puerta y Miguel Ángel Pichetto, además de otros dirigentes peronistas no kirchneristas de la provincia de Buenos Aires, que apuestan a esta alternativa para cerrarle el camino a Cristina y Máximo Kirchner que todos saben buscarán perpetuarse en el poder por varias décadas.
«En Salta, el «Peronismo Republicano» empezará a pisar fuerte porque hay muchos peronistas ansiosos por encontrar su espacio por afuera del kirchnerismo pero también de este peronismo ‘sui géneris’ que propone Gustavo Sáenz a través de Pablo Outes y su CAP».
Ese fue el comentario que dejó sobre una mesa de café el viernes a la noche, un histórico dirigente pejotiano que confía en que el peronismo, tal como fue concebido por su creador, vuelva a ser el que se instale en Salta.
«Ni kirchnerismo ni saencismo. Lo que necesitamos el volver al peronismo de Perón, pero adaptado a estos tiempos y este mundo, y eso es lo que el Peronismo Republicano propone. Un peronismo democrático, republicano, tolerante, honesto y abierto al mundo sin dejar de lado la justicia social», agregó el viejo peronista mientras apuraba un scotch de 18 años.
Actividad provincial
Así las cosas en lo nacional, en la provincia se avanza más aprisa con el armado de los frentes electorales y también, aunque más lento, con la definición de las candidaturas para el 4 de julio.
En el territorio K, según el comentario de uno de sus dirigentes que charló con este Portal, se espera que esta semana se puedan acercar posiciones entre los sectores que lo integran ya que hasta ahora las diferencias podrían provocar que la oferta electoral se atomice y termine perjudicando a todos.
En las tierras que domina el gobernador Gustavo Sáenz, en tanto, hay coincidencia en los partidos que lo integran, que la selección de sus candidatos deberá hacerse teniendo en cuenta que al no haber PASO, los nombres que se propongan deberán ser atractivos para una sociedad que no le presta atención a la cuestión electoral ya que lo que le aflige, en realidad, es la situación sanitaria y económica principalmente.
De todas formas, todos saben que apenas comience el cuarto mes del año habrá que intensificar definiciones porque el 5 de mayo tendrán que anotar los frentes y el 15 los candidatos.
La pandemia en escena
Para el final, tenemos que hablar de la creciente preocupación que existe en la provincia y también en el país ante la inminente llegada de la segunda ola de Covid-19 y la escasa provisión de vacunas.
Ya en algunos sectores, se comenzó a hablar con mayor insistencia cada día sobre si se podrán realizar las elecciones provinciales en la fecha elegida -4 de julio-, por la incertidumbre que genera el aumento de casos y la posibilidad de retroceder algunas fases restringiendo la circulación pública por la pandemia, lo que pondría en riesgo que los comicios se lleven adelante.
De todas formas, al menos por ahora, habrá que esperar sin desesperar.
Las semanas que vienen, en este sentido, serán cruciales para saber como se mueve la pandemia, aunque todos saben que al final será «Don Covid», quien tenga la última palabra.
