La conformación de un frente electoral entre el ala no peronista del saencismo con Juntos por el Cambio confirma el camino que Alberto Castillo, histórico dirigente del PRO en Salta, venía anticipando desde hace varios meses.
DANIEL SALMORAL.- Lo dijo innumerable cantidad de veces. Lo vio venir, lo anticipó y ahora se concretó. La llegada de los actuales “referentes” del PRO bajo el paraguas del saencismo para hacer frente a las próximas elecciones legislativas nacionales conformando un solo frente, termina por darle la derecha a Alberto “Beto” Castillo, uno de los fundadores del partido, otrora liderado por Macri, en Salta.
A Castillo lo habían intentado expulsar del partido por la intervención porteña del PRO, que intentaba sin éxito posicionar a Inés Liendo, por ser funcionario del Gobierno provincial. Otros integrantes del oficialismo, como Martín de los Ríos, también militante de la primera hora habían compartido su suerte.
Pero la aventura “puritana” que intentaban vender desde Buenos Aires para justificar las aspiraciones de la joven promesa bendecida por algún referente nacional no tomaba forma por ninguna parte y sumó tantos fracasos electorales como peleas y disputas internas que debilitaron al espacio generó.
Hoy, rendidos a la evidencia de los hechos, desde Juntos por el Cambio cierran filas detrás de la figura del gobernador Gustavo Sáenz y vuelven a visitar y a abrazarse con viejos amigos, como el “Capitán Beto”, bajo cuya estrategia electoral buscarán los éxitos en las urnas que se les vienen negando desde hace varios años.
Urgidos por lograr alguna banca en el Congreso Nacional para estar a tono de un futuro Gobierno nacional, que se presume distinto al actual, Liendo y compañía aceptan formar parte de todo aquello que repudiaron hasta hace un par de horas, cuando pudieron hacerle entender que, sin el Unidos por Salta del saencismo, no llegan.
Fuente: Saltapolítica.com
