La guerra Nación – Provincias tiene un nuevo impulso. El gobernador chubutense, Ignacio «Nacho» Torres, afirmó este viernes que si hasta el miércoles Nación no le envía los recursos que viene reclamando, «cortará los envíos de petróleo y gas». Ante esto, el presidente Javier Milei lo tildó de «extorsionador» y «degenerado fiscal». Enrarecido clima político y social.
DANIEL SALMORAL.- «Esto se va al carajo», le dijo un veterano dirigente político salteño a este Portal viendo la fuerte pelea que se desató este viernes en la tarde-noche entre el gobierno nacional de Javier Milei y el gobierno provincial de Chubut de Ignacio «Nacho» Torres.
La disputa entre el Estado Nacional y las Provincias que se agudizó fuertemente luego del fracaso por el tratamiento en particular de la llamada «Ley Ómnibus» en la Cámara de Diputados, parece haber llegado a su punto más crítico este viernes cuando el gobernador chubutense de Juntos por el Cambio, adelantó que «si hasta el miércoles (28 de febrero) el Ministerio de Economía no le entrega a Chubut sus recursos, entonces Chubut no entregará su petróleo y su gas».
Esta advertencia desató una verdadera guerra entre el gobernante libertario y el chubutense al que se sumaron otros mandatarios provinciales que, de manera concreta, le hicieron saber su apoyo al sureño.
Ante esto y fiel a su estilo, Milei salió con los tapones de punta calificando al gobernador patagónico como «extorsionador» y «degenerado fiscal», mientras que su Oficina de Prensa por medio de un comunicado le dice a Torres que «proceda con su amenaza» pero que «se haga cargo de las consecuencias en la Justicia».
El reclamo de fondos que hace Chubut y que es motivo del conflicto, ya había sido abordado por el ministro del Interior, Guillermo Francos, quien sobre eso dijo que «el descuento del que habla Torres es en realidad una deuda que mantiene Chubut con el Fondo Fiduciario para el Desarrollo Provincial. Por normas de emisión de dicha deuda, su cobro se realiza por descuento directo de la coparticipación», lo que quiere decir, según Francos, que es Chubut en realidad quien le debe a Nación por fondos que recibió durante la gestión anterior y que ahora debe devolver, mensualmente, con los recursos que le corresponden en concepto de coparticipación.
Lo cierto es que más allá de quién le debe a quién, la cosa escaló rápidamente desde lo político provocando la salida de un documento de «Las Provincias Unidas del Sur» en el que dicen; «en febrero el Ministerio de Economía de la Nación le retuvo ilegalmente (a Chubut) $13.500 millones, más de un tercio de su coparticipación mensual».
Este dossier que lo firman el propio Torres y otros mandatarios como Gustavo Melella (Tierra del Fuego) y Sergio Ziliotto (La Pampa); y del resto de los gobernadores de la región: Claudio Vidal (Santa Cruz); Rolando Figueroa (Neuquén); y Alberto Weretilneck (Río Negro) y a la que adhieren otros gobernantes tal es el caso de Axel Kicillof de provincia de Buenos Aires y Martín Llaryora de Córdoba, quienes niegan de manera contundente lo dicho por Francos generando con ello una inevitable disputa institucional.
Este tema enrarece aún más el convulsionado clima político que vive en el país alimentado especialmente por el propio Milei quien en los días pasados continuó descalificando y maltratando a gobernadores, legisladores y antiguos aliados políticos, como Ricardo López Murphy, a quien tildó de «traidor y «falso liberal».
Como si con eso no bastara y de pasada, el Presidente además liquidó las esperanzas de millones de jubilados cuando dijo que «no estaban tan mal como otros», desalentando así que puedan recuperar algo de sus deprimidos ingresos que vienen siendo la variable de ajuste de todos los proyectos presidenciales que pasaron por la Casa Rosada en las últimas décadas.
Estos decires del libertario, llevaron a que Eugenio Semino, Defensor de la Tercera Edad, calificara a Milei de «gerontofóbico» y que el ex titular de la Federación Agraria, Eduardo Buzzi, dijera que el Congreso «debería estar considerando llevar adelante un juicio político al Presidente por insania», completando así un combo demasiado peligroso para el país.
Todo esto hace prever que las horas y días que vengan con un Milei otra vez fuera del país, ahora en Estados Unidos, serán de una enorme expectativa y angustia para una sociedad agobiada por los ajustes que para muchos ya llegan a límites insoportables.
Epilogo
Siempre se dijo que la política se expresa de manera verbal y gestual y en ambos territorios queda en evidencia que Milei tiene la idea de seguir en «modo furia» peleándose con todos, inclusive con aquellos que exhiben muestras tangibles de querer ayudarlo retomando canales de diálogo.
Un claro ejemplo de esto fue la desconsideración que tuvo para gobernadores como Gustavo Sáenz, quien junto a algunos de sus pares llevó adelante un encuentro en Salta el martes pasado con Guillermo Francos, buscando retomar la comunicación institucional para beneficio sobre todo de la gente que es la que observa acongojada peleas «de perros grandes» que saben que al final los terminará perjudicando a ellos.
Cuando en una entrevista de horas atrás se le hizo referencia al libertario del encuentro en Salta de su Ministro político y los Gobernadores, el Presidente, en vez de ponderar ese gesto, afirmó que en realidad lo que hacían los gobernadores era «pedir la escupidera».
Ante tamaña muestra de soberbia y miopía política nada más y menos que de parte del Presidente de la República, solo cabe imaginar, como pronostican algunos, que estamos muy cerca de que todo, en verdad, se «vaya al carajo».
Como «ciudadanos de a pie», deberíamos estar atentos para evitar en la medida de nuestras posibilidades, que estos inexplicables juegos de poder no nos terminen perjudicando aún más nuestras ya difíciles vidas.